El pasado 26 de junio, en la Ermita de Ntra. Sra. de la Poveda, en el municipio de Villa del Prado, más de 50 cursillistas de toda la diócesis de Getafe celebramos la Ultreya de Fin de Curso.

Un curso complicado por la pandemia, pero en el que, gracias al Señor, hemos podido mantener en movimiento al Movimiento, como nuestros hermanos mayores de Cursillos España nos pedían.

En primer lugar, agradecimos al Señor ser nuestro sostén todo este tiempo con una Misa, celebrada por nuestro consiliario, el padre Yago Fernández de Alarcón.

Tras la misa, dos hermanas nos dieron su testimonio: Mila, de la Ultreya de Aranjuez, nos habló de su vivencia estos últimos meses, y Natalia, de la Ultreya de Arroyomolinos-Moraleja, nos habló de su conversión hasta llegar a la Iglesia católica, desde la Ortodoxa, pasando por la protestante.

Después, aprovechando el maravilloso entorno en que se ubica la ermita de la Poveda, con una explanada plagada de árboles, y, por tanto, de abundante sombra, participamos en una gymcana con distintas pruebas, dónde niños y mayores disfrutaron del campo, el aire libre y la libertad de la que hemos carecido este tiempo. Hasta una entrega de premios hubo, con medallas para los ganadores, reparto de diplomas para todos los participantes, y de chuches para los niños.